Hola chicos, cuanto tiempo ha pasado. Quiero empezar diciendo, que nunca me fui, y que regularmente he estado leyéndoos. Ganas no me faltaban de escribir algo en el foro, pero no encontraba el momento de decir algo positivo y por eso tanto retraso.
Quería decir, que des de la distancia, me ha producido a la par, admiración, envidia y resignación, veros entrenando tan bien. Y aunque no me gusta ir dando consejos gratuitamente, si que os diré que os cuidéis, i que le deis respiro al cuerpo, que un día, el menos pensado, las cosas pueden cambiar. Y aquí hablo tras mi experiencia y eso que yo me he cuidado siempre, pero los años pasan y aparecen los problemillas…
Lo que he estado padeciendo no se lo deseo a nadie, y probablemente es una concatenación de sucesos que han seguido una línea lógica, pero donde antes no pasaban estas cosas, ahora parecen juntarse, solaparse y traerme por la calle de la amargura al ver que no conseguimos encontrarnos bien del todo y tener regularidad. Rememorando un poco este 2021. Empezamos el año con rozaduras y heridas que me obligaron a hacer cambios de zapatillas, lo que pudo desencadenar posteriormente aquella crisis de dolor agudo que me dejó dos semanas sin poder caminar bien y cuatro en el dique seco. Justo un mes después del día D, volvimos a correr 20’, con dolor, con miedo con inseguridad. A partir de aquí, apoyado en el trabajo de los fisios, el arduo trabajo de core (con más ejercicios de glúteos, cadera…) y las pruebas diagnósticas favorables, iniciamos el camino para salir de la cueva.
Fue como empezar de cero, poco a poco. Sesiones de 30’ a días alternos. Fuimos aumentando muy lentamente los tiempos, los ritmos, las distancias, los días…Pasaron semanas, 18 para ser exacto, cuando estaba ya en mi primera semana de 5 días y me llevé otro duro golpe. Sobrecarga en el sóleo de la pierna derecha. Ya había tenido lesiones similares hace años y sabía que tenía que volver a parar otra vez, no quedaba otra, y así tuve que parar 3 semanas de nuevo y volver a empezar.
Y volvimos a empezar en la misma línea, sesiones cortas, recuperando entre días, aumentando, y llegando a mis primeros días de calidad en meses. Parecía que íbamos bien…pero llegó agosto y necesitaba un cambio de zapatillas y otra vez volvimos a la casilla de salida. Des de luego las Nike Epic React, no han sido unas zapatillas que recordaré con cariño. Cuatro pares, y todos me han dado problemas…Tienen una pieza en el interior del talón que junto a la plantilla hace que la zapatilla roce, más tarde o más temprano en el lateral del talón. Y este problema me lo han generado los dos modelos 1, y los dos modelos 2. Ya no habrá más, a parte de que ya no se fabrican.
Tan pronto empecé a usarlas, empezaron los problemas. A base de no querer parar, de la ilusión de correr por lugares preciosos, de ganas de seguir, pues eso, seguimos. Las soporté hasta casi 150 km, y ya no pude más. Era terrible el dolor al ponerlas, casi, no podía caminar, y correr, era un esfuerzo estoico de sufrir km a km. Tuve que dejarlo estar y recuperar de nuevo una solución de emergencia, unas Brooks Glycerin 17, (que me regaló la marca por el tema COVID y ser sanitario), equipadas con las plantillas viejas. Junto a los cuidados de las heridas (que a día de hoy están acabando de resolverse), pude seguir, eso si, 6 uñas perdidas, ampollas... Menudo sufrimiento en los pies este verano.
A pesar de todo, el mes de agosto se saldó con casi 370 km, la segunda vez que pasaba de 300 km en 7 meses…eso casi lo dice todo. Creo que debo llevar como unos 1000 km menos que otros años a estas alturas. Y todo eso tiene un reflejo, estoy lejos de mi forma, los entrenamientos son sufridos, pasan factura, cuesta recuperar... Cuesta encontrarse cómodo, disfrutar y hay más días “malos” que buenos, pero ahí seguimos peleando, contra los fantasmas, contra los dolores, las molestias, contra los problemas. Es más, os diré que algunas molestias en la zona lumbar izquierda siguen ahí. Unos días molestan más, otros menos, y los hay que ni me acuerdo, pero ahí siguen recordando que algo cambió en mi aquel 14 de febrero.
No sé si volveré a donde llegué a estar…pero seguiré intentándolo. Quería competir este otoño, pero no me veo preparado…quizá primavera, no sé. Maratón ?, ahora mismo lo veo tan lejano, no me siento capaz…Sólo me queda ir día a día y confiar en mí, y llenarme de razones positivas para seguir (aunque eso sólo depende de mí y de mi esfuerzo).
Así que acabaré diciendo que seguimos en la batalla, y que sin ir más lejos hoy hemos hecho un gran entrenamiento, que me ha dado una buena alegría. 5 x 1000 + 2 x 500; R: 2:30 (3:25 – 3:21 – 3:19 – 3:20 – 3:18 – 1:35 (3:11) – 1:31 (3:02). Seguimos…